Jóvenes:
Les
propongo que escriban un cuento policial. Como ayuda y para que sepan
bien adónde van, les doy el
principio, el medio y el final.
Estas frases tienen que aparecer tal cual en sus cuentos, en la
ubicación indicada. El
cuento tiene que tener como extensión mínima dos páginas.
Recuerden que un cuento policial tiene que tener un enigma
(¿qué es lo que pasa?) que, al final del cuento, tiene que
resolverse. Ustedes, jóvenes detectives, decidirán cuál es ese
enigma y cuál será su solución.
Principio:
En
el otoño de 1998, mientras viajaba por las provincias meridionales
de Francia, mi camino me condujo a pocos kilómetros de cierta Maison
de Santé, donde funcionaba un manicomio privado, del cual mucho
había oído hablar a mis amigos médicos de París.
Medio:
Volvieron
a oírse los gritos con mayor fuerza y al parecer más cerca se
repitieron por tercera vez con mayor intensidad.
Final:
Pero,
al fin, tras escapar por el sótano, uno de los internados logró
poner en libertad a todos los demás.
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